Lanzamiento: febrero de 2010
Plataformas: Playstation 3
Clasificación: +17
Temas: Familia, crimen, drogas, psicosis.
«Una experiencia única y emocionante», así defino yo a Heavy Rain.
Exclusivo de PS3, es una de las joyas que se pueden disfrutar solo en esta consola, propio de Quantic dream, compañía que se dedica a este tipo de juegos de terror psicológico, entre ellos Fahrenheit para PS2 y otro de sus éxitos Beyond: Two Souls. En particular éste se destaca por su grado de realismo, elementos cotidianos, personajes estereotipos y una fascinante trama digna de cualquier thriller. El contexto en el que se desarrolla este título es el misterioso caso del asesino del origami, una especie de psicópata que ahoga a sus víctimas con el agua de lluvia aprovechando las temporadas en que son más intensas las precipitaciones.
Por su categoría de juego cinematográfico o de escenas, carece de mucha acción y movimientos a nivel de jugabilidad, por lo que podremos solamente caminar y presionar ciertos botones para interactuar con los objetos y personajes, todo esto en escenarios pequeños sin muchos detalles. Gastaron muchos más recursos en el trabajo de motion capture y eso se nota por las hermosas fisonomías en planos detalle. En otras palabras, es sencillo y amigable para cualquiera, pero si eres experimentado existen distintos grados de dificultad que hacen mucho más complejo realizar las secuencias que se piden. La verdad esto último no lo recomiendo porque vale más la pena disfrutar de las películas que darse cabezazos con las distintas acciones.
Sus protagonistas son cuatro y se podrá jugar con cada uno de ellos, algo que me encantó. Lo que deben saber es que pueden morir en algún momento de la historia si no hacemos algo para evitarlo, es decir nuestras decisiones son muy importantes. Ethan Mars me tocó el corazón por esas ansias desesperadas de rescatar a su hijo, aparte que su diseño lo hace más conmovedor todavía; Madison Paige no era totalmente necesaria al final pero entre medio ayudaba a desmenuzar mejor los hechos y el pasado de los otros personajes; Norman Jayden es a quien más disfruté por mis costumbres de jugador explorador, y en eso hay mucho para divertirse con el sistema ARI en las escenas del crimen; y finalmente Scott Shelby, de quien no me fiaba desde el principio y no me equivocaba, pese a eso me gustó mucho sus intervenciones en el drama.
Los trofeos son en la mayoría relacionados con la historia, pero en general los capítulos tienen al menos dos caminos, los cuales te llevarán a trofeos distintos obligando al jugador a repetir el nivel para obtenerlos. Con ayuda del modo sin guardado automático podremos repetir cualquier capítulo sin perder el hilo de la partida original. Los dos trofeos perdibles, Crimen Perfecto y Cerebrito, que hacen referencia a seguir una secuencia específica de acciones a lo largo de varios capítulos, y a obtener todas las pistas y pruebas de ARI respectivamente, les aconsejo apoyarse en una guía como yo lo hice porque es bastante fácil pasar por alto algo. Para conseguir Todos los finales es preciso terminar el juego varias veces y en distinto orden, dejando a algunos vivos y otros muertos, nada imposible.
Como ya dije antes, es un juego que vale la pena disfrutar en su primera pasada, dejando que haga su trabajo encantando y sorprendiendo a medida que todo se va descubriendo por sí mismo. Les recomiendo jugarlo de noche, no se arrepentirán.